Día 2: Primer día en la capital, Mascate
Después del viaje de más de 5 horas, y alguna parada extra para fotografiar y ver algunos rincones y pueblos durante el camino, llego a mi hotel en Mascate, a unos 20 minutos del centro. Como siempre me alojo en hoteles sin grandes lujos, en los barrios más antiguos de la ciudad, que me permitan aparcar el coche, ya que me gusta durante mi estada vivir la experiencia de sumergirme dentro de la cultura del país.

Nada de lujos, una habitación pequeña, un baño correcto, quizás un poco sucio, pero por menos de 30 euros la noche tampoco puedo pedir mucho más. El personal era amable y parecía que era un negocio familiar.
Después de descansar y dejar todo mi equipaje, me dirijo hacia el centro de Mascate para empezar a visitar la ciudad.
Mutrah
Este es el barrio céntrico y antiguo de la ciudad, donde se encuentra la mayoría de lugares a visitar. En él, podrás encontrar callejuelas para poder perderte, una de las mejores cosas que puedes hacer por Mascate.

Entre las calles, puedes ir encontrando varias mezquitas, no solo te darás cuenta que estas delante de ellas por su forma si no por los múltiples llamadas la oración durante todo el día.
El viejo Zoco de Omán
Uno de los mejores lugares que ver en Mascate. Suele estar abierto a primera hora de la mañana, pero es cuando cae el sol cuando gana en vida y las calles empiezan a llenarse de gente.
Se trata de unas calles repletas de tiendas y cubiertas para evitar el calor, donde en sus decenas de establecimientos podrás adquirir prácticamente de todo.
Corniche de Mutrah
Es un animado paseo marítimo junto al zoco y que se extiende a lo largo de la bahía. Desde aquí se ven los dos grandes yates del sultán, puedes pensar que son cruceros, pero no, suelen estar amarrados y no es difícil verlo durante unos días en el puerto que hay al norte.

En este paseo marítimo está una de las mezquitas más bonitas de Mascate. Lo notaras por el bullicio de gente en la puerta y de la entrada y salida de omaníes durante todo el día y parte de la noche. Desafortunadamente, no está permitido el acceso a los no musulmanes. También se ubican junto a Corniche, algunas de las casas más antiguas de la ciudad, poseen una arquitectura muy característica y llamativa con unos balcones con celosías para mantener la intimidad de las mujeres de la casa.
Mercado de pescado de Mutrah
Se encuentra al final de Corniche, y puedes comprar tanto pescado como verduras, en dos lugares claramente diferenciados. Son unos lugares bastante animados, y todo y que no hablan apenas inglés, no es difícil interactuar con ellos.

En la parte de verduras y hortalizas, puedes encontrar frutas exóticas importados de india y otros países, pues los omaníes aman los zumos. También es un buen lugar para comprar dátiles y otras frutas.
Bimmah Sinkhole
Este lugar se encuentra a unas 2 horas de la capital hacia el sur. Personalmente es un lugar bonito de ver, pero este sí que sería para mí una de las cosas que dejaría si realmente no tuviera tanto tiempo para visitar el país u otras cosas como la mezquita, el desierto o el fuerte de Nizwa.
Este lugar lo explico más detalladamente en este post
Fuerte de Nizwa
Nizwa se encuentra a una hora y poco de Mascate, la capital del país. Se puede aparcar sin problema en el exterior de la fortaleza de la ciudad, y no puedes dejar de visitar ni el mercado dentro de la fortaleza ni el fuerte.
Este lugar también lo explico más detalladamente en este post
La gran Mezquita del Sultán Qaboos en Mascate
La gran mezquita es la única que los extrangeros y no musulmanes podemos visitar en un horario bastante restringido de 8:00h a 11:00h, menos los viernes que está cerrado.
Para mí, una de las mejores cosas que ver en la ciudad, difícilmente no sabría decir si es mejor esta o la de Abu Dhabi, las 2 son igualmente espectaculares.

Esta fue construida en 1992 y no se escatimó en gastos, utilizando los mejores materiales. Tiene una capacidad para 20.00 feligreses y se tardó a construir más de 6 años. Tiene un minarete principal de más de 90 metros y otros 4 minaretes secundarios.
Para poder entrar necesitas dejar el calzado en la puerta.
La sala de rezo principal es la más espectacular y puede albergar 6500 personas y en el suelo cuenta con una alfombra enorme de solo una pieza con 1.700.000.000 nudos y pesa 21 toneladas. Justo encima, a 50 metros existe la lampara de araña de 14 metros de altura, realmente espectacular.

No solo el interior es increíble si no que los exteriores también están muy cuidados, y merece la pena perderse por los jardines y el resto de las estancias exteriores.
La entrada es gratuita y sería una visita imperdible en un viaje a Omán.


Empieza a caer el sol, y es cuando decido volver a visitar Corniche, ya que la ciudad por la noche se transforma y gana en vida. Merece la pena visitarla de nuevo.
Después de una buena cena en un restaurante local, me dirijo ya al hotel para descansar, pues mañana tengo un viaje al centro del país para poder vivir una de las mejores experiencias en este viaje.
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